Francisco Gutierrez

Hoy nos movemos en un mundo altamente cambiante y atestado de desarrollo científico, técnico y tecnológico. Un mundo condicionado por los intereses de una globalización económica, donde el imperativo es consumir, y donde aquellos que producen de manera individual y distinta son absorbidos, en el mejor de los casos, o anulados por el sistema capitalista. Ahora bien, ese estado de cosas ha puesto en riesgo de pérdida al sujeto racional heredado y caracterizado desde la modernidad y que es requerido hoy día como sujeto de racionalidad tecnológica. El sujeto-persona-agente racional se encuentra en una encrucijada ante la sociedad de consumo y el sistema económico de producción. La encrucijada consiste en si sigue aceptando el ser considerado y utilizado como un objeto, cosa, instrumento, artefacto más dentro del sistema artefactual o recobrar la capacidad de racionalidad, heredada desde la Modernidad y refrendada como racionalidad tecnológica desde la Revolución Industrial.

Hoy nos movemos en un mundo altamente cambiante y atestado de desarrollo científico, técnico y tecnológico. Un mundo condicionado por los intereses de una globalización económica, donde el imperativo es consumir, y donde aquellos que producen de manera individual y distinta son absorbidos, en el mejor de los casos, o anulados por el sistema capitalista. Ahora bien, ese estado de cosas ha puesto en riesgo de pérdida al sujeto racional heredado y caracterizado desde la modernidad y que es requerido hoy día como sujeto de racionalidad tecnológica. El sujeto-persona-agente racional se encuentra en una encrucijada ante la sociedad de consumo y el sistema económico de producción. La encrucijada consiste en si sigue aceptando el ser considerado y utilizado como un objeto, cosa, instrumento, artefacto más dentro del sistema artefactual o recobrar la capacidad de racionalidad, heredada desde la Modernidad y refrendada como racionalidad tecnológica desde la Revolución Industrial.

The effort to build a political economy of war without politics is finding its limits. The question now is what comes next. How to put politics back in? This article compares systematically two non-state armed groups that participate in the Colombian conflict, the main guerrilla and the paramilitary. It shows that despite their similar financial bases, they appear to exhibit systematic differences— regarding both their social composition and their internal/external behavior—and claims that the key to understanding them is the set of organizational devices that each group crafts in its process of survival and growth. All this suggests that a main tenet of the early political economy of war, that all non-state armed groups can be understood as being strategically identical, is flawed. It also poses a classificatory challenge.

This article examines the Kantian ideas on motion in his work Metaphysical Foundations of Natural Science. In that essay, Kant holds that motion as a concept—from its connotation as elemental and fundamental predicament of the material reality—mobilises in matter all the characteristics of its essence as a property. Nevertheless conceiving motion as a concept does not enable us to confirm the existence of motion itself in the natural world because ‘the possibility of specific natural things can’t be discovered from their mere concepts.’. Therefore, the concept of movement does not evidence the existence of the movement or its characteristics and properties. Such claim would imply that motion as a concept is not evidence of the existence of motion as such and, therefore, the properties of matter cannot be mobilised based on that concept because they are characteristics of the essence of motion. Then, how does Kant intend to denote motion? Why pretend to explain matter form the concept of motion if a pure concept is, by definition, independent of the data obtained from the sensibility?. Therefore, we will demonstrate that such weakness is the breaking point of the Kantian concept of motion in his “dynamic-metaphysical” model.

Siguiendo parcialmente el pensamiento de Hugo Assmann, quien plantea las preguntas basales de cómo educar y cómo aprender, se postula que se aprende durante toda la vida y mediante todas las formas de vida, coincidiendo ello con la facultad de los seres vivos de la autoorganización. Aprender resulta así un proceso donde coinciden los procesos vitales con los procesos de conocimiento. Surge de ello una biopedagogía que, asentada en el placer de aprender, está en condiciones de reencantar la educación. Para ilustrar las implicancias pedagógicas de este enfoque, se presentan los testimonios de cuatro vivencias de aprendizaje