Dieter Henrich

The International Hegel Association accepts as its members philosophers who have published on Hegel and his historical environment or on philosophical problems that have reference to Hegel’s philosophy. Every second year it announces a colloquium at which approximately fifty specialists can take part. Every sixth year an international congress takes place which is open to the general public. The last international congress on ‘Is Systematic Philosophy Possible?’ met in Stuttgart from May 28th to May 30th, 1975. The next colloquium on ‘Schelling and Hegel in Jena, the ultimate formation of Hegel’s System’ will take place in Nizza in 1977. Members of the association will receive a News-letter and will be able to order the supplementary series to the Hegel-Studien at a reduced rate. The annual membership fee is DM 25, -. Applications for membership can be mailed to the President, Professor Dieter Henrich, Philosophisches Seminar, Universität 69 Heidelberg, Marsiliusplatz 1.

On considere communement que la philosophie de la subjectivite a ete definitivement depassee par les differents courants de pensee du XXe siecle. Alors que l'approche naturaliste des neurosciences vise a une reduction complete de la conscience individuelle aux activites neuronales du cerveau, la phenomenologie de l'intersubjectivite et la philosophie de la communication contemporaines presupposent comme acquis que la relation a autrui jouit d'une primaute ultime sur toute egoite du moi. Sans proner un simple retour a la metaphysique du sujet au sens classique, le present ouvrage entend montrer que la philosophie ne peut ni ne doit renoncer a la pensee de la subjectivite dans la mesure ou tout rapport au monde naturel et toute relation a autrui decoulent de la dynamique de la relation a soi primordiale dans laquelle chaque sujet se constitue a la fois comme libre et fini.

This paper wishes to establish some connections with the intentions that have informed the project of the philosophy of the subject. This project has especially been represented by the work of Fichte, although today it is important to make it relevant to contemporary philosophical problems and issues. A renewed philosophy of the subject must not risk being exposed to the fundamental critique, so eloquently formulated by Heidegger, that, like Fichte's work, it can begin once again from the conviction that we can lead a human life only on the basis of acts of the universal objectification of everything there is and on the basis of an act of self-empowerment. This paper proposes that a renewed philosophy of the subject has to try to bring itself into harmony with our experience and awareness of human limitations and ambivalence.

La teoría de la Crítica del Juicio de Kant ha sido generalmente considerada como punto decisivo en la historia de la Estética y la Filosofía del arte. Ella reúne y reconstruye los resultados de los análisis de los predicados estéticos y la actitud estética surgida en las escuelas de Leibniz y Locke, tal como han sido formuladas por filósofos como Baumgarten y Sulzer de un lado y Hume y Burke de otro. Pero también elevó la teoría estética a un nuevo nivel, -integrándola en el sistema de una nueva epistemología que Kant había trabajado con éxito en la Crítica de la Razón Pura, basándose en la consideración según la cual, lo que llamamos razón consiste en una compleja interacción de varias operaciones epistémicas. Con miras a comprender lo que logra la "razón" hay que atender a las operaciones de las cuales procede tal logro. Además hay que atender a las fuentes en las que estas operaciones se originan y a los principios o reglas que las guían. La Crítica del Juicio descubre tal fuente con respecto a la apreciación de lo bello (y lo sublime). De este modo ha probado ser capaz de separar juicios estéticos de otras clases de juicios, al mismo tiempo que les conserva su pretensión de originarse en la razón en cuanto tal y en actividades que están entrelazadas con aquellas de las que depende todo el conocimiento de nuestro mundo. Estos juicios, sin duda, no expresan conocimiento. Pero su pretensión está igualmente justificada porque se funda exactamente sobre las mismas actividades que originan el conocimiento, aunque en un empleo interactivo peculiar. Por medio de este punto de vista, Kant provee por primera vez herramientas para el establecimiento de la actitud estética como independiente y autónoma, y de esta forma como el fundamento para una concepción del arte como un modo primordial de estar relacionado y situado dentro de nuestro mundo, que no puede ser reemplazado ni sobrepasado por otras realizaciones de las capacidades racionales del hombre.