Manuel Serra

El nuevo milenio ha dejado atrás un siglo que ha visto renacer la filosofía del ser de Tomás de Aquino. Algunos de sus más destacados comentaristas, han desafiado la interpretación tradicional de la escuela tomista dominicana. En este artículo, se pretende confrontar una reciente contribución cuyo autor buscar justificar la posición tradicinoal del tomismo acerca de la noción de esse ut existentia. Frente a ella, se presentará otra que ponga de relieve el original estatus del esse ut actus essendi, a la luz de lo que el Aquinate afirma en C.G. I, c. 28, n. 2.

Manuel Alejandro Serra Pérez L’expression « virtus essendi » utilisée par Thomas d’Aquin dans certains passages de ses oeuvres a été un des sujets abordés dans le thomisme contemporain chez les plus importants commentateurs d’Aquin. Étienne Gilson fut le premier des commentateurs qui écrivit des notes explicatives sur son sens, montrant que ce pouvoir dont l’expression parle fait référence à la source d’où provient toute perfection et actualité, l’esse ut actus essendi. De son côté, le dominicain canadien Lawrence Dewan, particulièrement intéressé à montrer que cette « virtus » est partagée par les deux co-principes de l’étant, à savoir, la forme et l’être, considère au contraire que la doctrine thomiste de la « virtus essendi » développe plutôt le thème que la forme est le principe de l’être (principium essendi). Face à ces deux lectures contraires, dans cet article nous proposons d’en faire une analyse systématique et de proposer une possible piste d’investigation qui éclaire le sens de ce que Thomas d’Aquin comprend par l’expression « virtus essendi ».

Resumen: El pasado siglo XX ha sido testigo de un renovado interés por los planteamientos de la filosofía aristotélica, en especial de la mano del filósofo alemán Martin Heidegger. Pues bien, junto con esta vuelta al estudio de la filosofía peripatética, ha surgido como en paralelo un nuevo interés por la filosofía del ser de Tomás de Aquino, en particular por su noción de esse ut actus essendi. Esto ha desembocado en diversas líneas de investigación, a veces confrontadas, que han versado sobre todo en la cuestión de la recepción tomasiana de la noción de ente y los aspectos en ella implicados. En este trabajo se procurará dar a conocer algunos aspectos importantes de esta recepción, así como de esas distintas líneas de interpretación confrontadas. Abstract: The past 20th century has witnessed a renewed interest in the approaches of Aristotelian philosophy, especially from the hand of the German philosopher Martin Heidegger. Well, along with this return to the study of peripatetic philosophy, a new interest in the philosophy of being of Thomas Aquinas has emerged as a parallel, particularly in his notion of esse ut actus essendi. This has led to various lines of research, sometimes confronted, which have dealt mainly with the question of the Tomasian reception of the notion of being and the aspects involved in it. In this work we will try to make known some important aspects of this reception, as well as of those different lines of interpretation confronted.

Uno de los temas más debatidos en el período inmediatamente posterior a la muerte de Tomás de Aquino fue cómo interpretar fielmente de acuerdo a sus textos el concepto de esse, dada la cualidad metafísica particular que éste adquiría en esta nueva ontología. Teniendo en cuenta que durante la escolástica los pensadores trataban de servirse de la filosofía como instrumento para explicar la fe, la comprensión del esse como distinto realmente de la esencia, fue el centro del debate por ser la base del principal argumento para mostrar la diferencia ontológica entre Dios y las criaturas.

For one of the current scholars of Thomism, Serge T. Bonino, research on Thomas Aquinas’ philosophy of being has polarized into two tendencies, the axis of which is the Dominican Thomistic school. One of them is represented by the harsh criticisms that the French medievalist Étienne Gilson made of the positions of this school. The second, on the other hand, is characterized by a staunch defense of the theses of the main commentators of this school. During the 20th century, one of Gilson’s students, the Canadian Lawrence Dewan, openly opposed Gilsonian Thomism on the basis of the traditional interpretation. Today, some of his students consider this Dewanian proposal as a “nouvelle métaphysique thomiste,” assuming that it is a movement that brings a genuine renewal. In this article we will show that this movement, although it claims to be a novelty, is nothing more than the revitalization of the formalist theses of the Dominican school, and therefore cannot be considered a valid interpretation of Thomas Aquinas.

After the criticism that Martin Heide-gger made of Western metaphysics some authors like Gilson or Fabro, among others, wanted to enter into confrontation giving them the oppor-tunity to study in depth most important theses of authors like Thomas Aquinas and his esse philo-sophy. Gilson’s theses had an important impact on the world of Thomism, but Lawrence Dewan, also a Thomist, wanted to defend against Gilson the traditional interpretation of Cayetano and Capreolo, which until now had been regarded as the most celebrated commentators of Thomas. This article investigates a specific point of this confrontation: the causation of esse. El legado de Martin Heidegger con su crítica a la metafísica occidental ha suscitado numerosos estudios en torno a la perenne cuestión acerca del ser, la metafísica y el fundamento mismo de la filosofía. Étienne Gilson, entre otros autores, fue un medievalista que tomó el pulso al pensador alemán para demostrar que Tomás de Aquino no esencializó el ser, como aquél pretendía. Sin embargo, junto con el Francés, en torno a la filosofía del ser tomista surgieron otros estudiosos que quisieron confrontar el tomismo gilsoniano con lo que entendían era un modo más adecuado de entender el verdadero tomismo. Uno de los puntos más interesantes sobre esta confrontación es, sin duda, el papel del esse tomista en la comprensión de la causalidad, entrando aquí en juego, a posteriori, interesantes cuestión en torno a la relación entre el pensamiento tomista y el aristotélico.